UTM 30T 404713 534462 960 m.

(SEGOVIA) (Ver mapa de Segovia)

La iglesia de la Vera Cruz se halla poco al noroeste de la ciudad de Segovia pasado el río Eresma en dirección a Zamarramala. El exotismo de su planta central la hace diferente a lo habitual en las edificaciones de época románica y por tanto un templo que merece la pena visitar. El día en que lo visité, madrugué para esperar la salida del Sol y poder mostrarla iluminada con sus primeros rayos que le proporcionan un agradable tono rojizo ante la inigualable figura del Alcázar como soberbio telón de fondo.

El templo fue edificado por canónigos de la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén y dedicado al Santo Sepulcro, según reza lápida al interior, el 13 de septiembre de 1208. En el año 1531 se produjo la unificación de la Orden del Santo Sepulcro con la Orden de San Juan de Jerusalén pasando a depender el templo de la Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta. En el año de 1951 volvió a tomar posesión del templo la Orden de Malta, bajo cuya propiedad permanece en la actualidad. Las banderas al interior hacen referencia a las diversas lenguas en que se divide la mencionada orden (24 de febrero de 20111).

Al interior del templo, en la capilla del Lignum Crucis situada en la planta baja de la torre se muestra una galería de los Grandes Maestres de la Orden de Malta. El que ocupó el número 47 fue Frey Juan de Omedes y Coscón, príncipe soberano desde el 11 de octubre de 1536 hasta su muerte en 1553 (Imagen 2). La coincidencia de apellido así como su procedencia (fue bailio de Caspe y mi bisabuelo materno procedía de un pueblo a 30 kilómetros de ese lugar, Calaceite) me permiten conjeturar acerca de una hipotética vinculación con su linaje.

Para comprender el por qué de los edificios de planta centralizada hay que recurrir al magnífico trabajo de Pedro Luis Huerta, secretario de la Fundación Santa María la Real de Aguilar de Campoo publicado en las actas de sus cursos de 2005: "Exotismo y singularidad de las iglesias de planta centralizada" pag.: 40-69. En el mencionado trabajo al que corresponden las imágenes 7 a 9 pertenecientes a lo publicado por J.M Merino de Cáceres en lo referente a la Vera Cruz, se retrotrae su origen al año 325 en que la emperatriz Elena, madre de Constantino el Magno motivada por las explicaciones de obispo Macario de Jerusalén acerca del lamentable estado de los lugares donde ocurrieron los episodios de la muerte de Cristo, fue hasta allí y localizó el lugar de la crucifixión y la tumba de Cristo. Probablemente a este episodio haga referencia la escultura del tímpano de la iglesia de San Justo, mostrando a santa Elena acompañada de otras dos mujeres a semejanza del pasaje de las tres Marías ante el sepulcro vacío de Cristo, con el obispo Macario tras las mismas (Ver pagina dedicada a este pasaje).

El complejo Constantiniano edificado al hilo de estos dos lugares se compone de este a oeste de un atrio, una basílica o martyrium, un segundo atrio interior donde se hallaba el Gólgota y una rotonda o Anástasis (en griego: "resurrección") donde se hallaba el sepulcro de Cristo (Imagen 7). Será este modelo circular el que exportarán los cruzados de modo muy genérico en recuerdo del lugar del sepulcro de Cristo. Pero no era solo este el origen de los edificios de planta circular. También con la misma estructura se erigieron mausoleos -a los que la anastasis imita- y baptisterios.

En España, iglesias de planta centralizada podemos hallarlas en Navarra (Torres del Río y Eunate), Castilla-León (La Vera Cruz de Segovia) o en Cataluña (Sant Pere de Cervera, la Rodona de Vic, San Miguel de la Pobla de Lillet, la capilla del Castell Yuça, Saldes, Sant Jaume de Villanova y Sant Sepulcre d´Olerdola). P.L. Huerta descarta su origen templario y los esoterismos gratuitos al hilo de estas suposiciones, apuntando más a su uso funerario como lugar de culto a los muertos.

La iglesia de La Vera Cruz es un templo que no destaca por su magnificencia arquitectónica ni por la decoración escultórica. Aparentemente de sencilla hechura a base de mampostería reforzada con sillares en las zonas sensibles, su estudio en profundidad revela sin embargo unos cuidadosos cálculos edificativos llevados a cabo en una sola vez. Consta de una estructura interior central de doce lados y dos alturas alrededor de la cual hay un deambulatorio anular cubierto por bóveda contínua de medio cañón. El muro de cierre es poligonal -dodecagonal- al exterior mientras que al interior es circular.

Tres ábsides se ubican en su lado oriental, de mayor altura el central. Con posterioridad se añadió un cuarto absidiolo septentrional al igual que se hiciera en San Millán. Posee una torre adosada al ábside sur y completan el conjunto dos portadas, una a sur y otra a poniente. Por delante de la base de los ábsides hallamos diferentes sepulturas antropomorfas de eje oeste-este con la cabeza a poniente como es la norma (Imagen 17).

En los sillares del templo, tanto al exterior como al interior encontramos algunas marcas de cantería tan escasas en número como en variedad (Imagen 10).