Después de visitar el templo de San Isidoro de
León con sus dos fantásticas portadas, su interior y el
tremendo panteón real con sus espectaculares pinturas, uno parece
saturado de arte; pero aun queda un poquito más. Al norte del templo se halla el claustro lindante con
la nave lateral septentrional y con el panteón real. Varios de
sus arcos abren a la crujía sur del mencionado templo, que es la
que resta de estilo románico. Las otras tres son renacentistas
(Imágenes 1 a 4). En la planta del templo (Imagen
3) señalo en color amarillo el espacio claustral, en rojo
la crujía románica y en verde el espacio del panteón
real.