La cilla se sitúa
perpendicular al refectorio de conversos, interpuesta entre este y los
pies del templo y alineada con el desaparecido nartex (ver
planta). Cinco arcos de medio punto que arrancan del nivel del suelo
sustentan una techumbre de madera apeada en ellos y en ménsulas
de madera, también de rollos, conformando un bello alfarje mudéjar
en vías de restauración. Era este el lugar donde acumulaban
y gestionaban los conversos los distintos alimentos y bienes necesarios
para el correcto funcionamiento de la comunidad monástica (Imágenes
1 y 2)
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Múltiples son
las marcas de cantería que se pueden apreciar por los distintos
lugares del monasterio. Sin intención de exahustividad he recogido
algunas de las de más bella factura. O al menos las que más
me han gustado. A continuación las muestro. Además hay cruces,
diagonales, flechas, pentalfas...
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Las imágenes
7 y 8 corresponden a una imagen aérea del Sig-Pac en donde
se puede advertir la actual morfología monástica. su perímetro
vallado y la orientación del templo, ligeramente desviado al sur.
También la planta, modificada del "Corpus de Arquitectura
Monástica Medieval" (UAM) a partir de fotografías de
paneles al interior del claustro.
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