El interior del templo, como ya se ha
dicho, consta de una cabecera dotada de profundo presbiterio y a
continuación la nave que se compone de tres tramos señalados por sendos
grupos de haces de semicolumnas adoptando aspecto de pilastra circular. Cada uno de los tramos se cubre por bóveda
de crucería estrellada que en conjunto aparenta una semiesfera reforzada
por nervaduras, dado que los tramos son de planta casi cuadrangular. Los
haces de semicolumnas aportan soporte a los arcos torales doblados de
estas bóvedas en los que apean las nervaduras descritas. Es destacable que los capiteles de la
cabecera se ubican paralelos a los muros; mientras que en la nave, ya con
un giro más evidente hacia lo gótico, se disponen en modo oblicuo para
mejor recibir el empuje de las nervaduras de la bóveda estrellada.
La visita al templo se incluyó dentro del
acto final del curso 2006 de "Introducción al Románico" de la Fundación
Santa María la Real. En las imágenes se advierte el templo casi tan
recargado de aficionados al románico como de decoración.
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El interior del templo es tan recargado y
denso como su exterior. Solo las bóvedas, con su disposición de crucería,
le dan un toque "ordenado". El interior del cilindro absidal es
semicircular, a diferencia de lo visto al exterior que es poligonal. El único vano funcional es el central. El del
lado norte se ha sustituido por un sepulcro del XIV y el del lado sur,
cegado, por una bella estructura geminada de formas retorcidas y
recargadas, más próximas a lo barroco que al periodo a que corresponde (Imágenes
4 y 5).
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La imagen 3, muestra la pilastra
forrada de semicolumnas que separa presbiterio sur del primer tramo de la
nave. Es destacable que se eleva sobre un zócalo semicircular así como el
hecho de que la diferencia de anchura entre presbiterio y nave se traduce
en que hay un menos número de semicolumnas entre uno y otro lado de este
conjunto. Ya en los tramos de la nave, los haces de
semicolumnas acaban hacia el interior del templo con una doble semicolumna
y otras columnillas en número de tres a cada lado.
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En la imagen 7 vemos una escena en
la que se hallan afrontados dos bestias apocalípticas de siete cabezas,
repitiendo lo que en un capitel del exterior hemos visto. Luego motivos
geométricos y una fiera que parece dispuesta a saltar sobre el espectador.
A continuación (Imagen 8) grupo formado por monstruo, dos cabecitas
y una escena en que una dama, semejante a la vista al exterior
proporcionando arma al caballero, se halla ante un ataúd en que hay un
cadáver. Quizá enterrando a quien proporcionara el arma o a alguno de sus
caballeros (?). Más allá (Imagen 9) dos fieras
acosando y atrapando a un "dorkon". Geométricos y una arpía. En la imagen
13, dos basiliscos enfrentados, con colas al estilo de lo visto para las arpías en la
escultura del maestro de Agüero, motivos geométricos y una barca con media
docena de personas y un barquero. El mismo grupo desde el lado opuesto,
se muestra en la imagen 12.
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En la imagen 10 motivos mayoritariamente
geométricos. Destaca la decoración de los ábacos, a base de circulitos
apuntados que recuerda el estilo de los del taller de San Andrés del
Arroyo. En la imagen 12, lucha entre caballeros y motivos vegetales
a los lados, con árboles cuajados de fruto. Y en la imagen 14,
correspondiente al grupo del último tramo del lado sur, no se complicaron
la vida y todos los capiteles lucen motivos vegetales, mayoritariamente
árboles con frutos.
