LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO
Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España)
| Presentacións | Novedades | Mapa del Sitio | Mapas Activos | Opinión | Castillos XI-XIII | Rutas Románicas | Monográficos | Otras Regiones
Enlaces | Bibliografía | Diccionario | Distinciones | Premio Romanico Aragonés | Fondos de Escritorio | Inicio |
-SANTO DOMINGO DE LA CALZADA. CATEDRAL DE SANTO DOMINGO-
(LA RIOJA)
VER MAPA INTERACTIVO
MENÚ DESPLEGABLE.............................................(Seleccionar zona de la Catedral) EXTERIOR-GENERALES-CAPITELES EXTERIOR-CANECILLOS INTERIOR-GENERALES INTERIOR-ÁBSIDE CENTRAL INTERIOR-CAPITELES DEL ÁBSIDE CENTRAL INTERIOR-CAPITELES DEL DEAMBULATORIO INTERIOR-CAPITELES ALARGADOS DE LA GIROLA DECORACION DE LAS PILASTRAS EN LA GIROLA CRIPTA DE SANTO DOMINGO
Ya hacía algún tiempo que Daniel Zabala y yo teníamos el propósito de visitar Santo Domingo de la Calzada. Daniel es un apasionado de la arquitectura románica y en especial del enigmático e inacabado templo altoaragonés de Santiago de Agüero del que muchos historiadores señalan las notables coincidencias en el plano escultórico con la concatedral calceatense. A principios de noviembre de 2006 pudimos coincidir un día entre semana y gracias a las facilidades ofrecidas por el párroco de Santo Domingo, visitar el templo, recorrer sus rincones, tomar imágenes y llevar a cabo mediciones de la cabecera para confrontar estilos edificativos con Santiago de Agüero.
Santo Domingo de la Calzada es una pequeña villa de poco más de 5.000 habitantes situada en el Camino de Santiago, entre Logroño y Burgos. La morfología de su callejero atravesado por el Camino, que aquí es "Calle Mayor" nos habla bien a las claras de su organización medieval. Además, su perímetro se amuralló por completo, y quedan bastantes tramos de muralla del primer tercio del siglo XIV (Imágenes 8 a 10). Santo Domingo, ermitaño que vive en la segunda mitad del XI, se afanó en restaurar el Camino de Santiago desde su lugar de ubicación junto al río Oja hasta Redecilla del Camino. Construyó un puente sobre el río, iglesia, albergue de peregrinos, etc. Por todo ello es patrono de los ingenieros españoles. Fue discípulo del obispo Gregorio Ostiense. Murió en 1109 a los 90 años. Su fama de santidad promovió las visitas a su sepulcro, visita recomendada por Aymeric Picaud en el Codex Calixtinus. Este hecho junto con las desavenencias de su obispo con el monasterio de Santa María la Real de Nájera, propiciaron la edificación de una bella catedral con un estilo y unas proporciones de partida propias de las grandes iglesias de peregrinación. Iglesias que ya se habían dejado de fabricar tras la conclusión de Santiago de Compostela. Ello explica la espectacular distribución arquitectónica de la cabecera del templo, única zona del mismo que llegó -en parte- a edificarse bajo los cánones del románico.
Es importante añadir que hasta no hace mucho tiempo la cabecera de esta catedral románica pasaba desapercibida por el hecho de que el majestuoso retablo de madera, última obra de Damián Forment, la ocultaba. En 1994 se retiró para su restauración dejando a la vista la impresionante hechura arquitectónica y escultórica de la misma. En la actualidad el retablo se halla reubicado en el brazo norte del transepto. (8 de noviembre de 2006).
12
La leyenda de uno de los milagros atribuidos al santo en relación con un injusto ahorcamiento ha llegado hasta nuestros días, sustentando el atípico hecho de la existencia de un gallinero gótico en el brazo sur del crucero:
"Sin duda alguna la catedral de Santo Domingo de la Calzada es la única donde se conservan a un gallo y una gallina. Cuenta la tradición que, entre los muchos peregrinos compostelanos que hacen alto en esta ciudad para venerar las reliquias de Santo Domingo de la Calzada, llegó aquí un matrimonio alemán con su hijo de 18 años, llamado Hugonell. La chica del mesón donde se hospedaron se enamoró de Hugonell pero, ante la indiferencia del muchacho, decidió vengarse. Metió una copa de plata en el equipaje del joven y cuando los peregrinos siguieron su camino, ella denunció el robo al alcalde. Las leyes de entonces castigaron el delito de hurto con pena de muerte y una vez prendido y juzgado, el inocente peregrino fue ahorcado. Al salir sus padres camino de Santiago de Compostela fueron a ver a su hijo ahorcado y, cuando llegaron al lugar donde se encontraba, escucharon la voz de Hugonell que les anunciaba que Santo Domingo de la Calzada le había conservado la vida. Fueron inmediatamente a casa del alcalde de la cuidad y le contaron el prodigio. Incrédulo, él les contestó que ''su hijo estaba tan vivo como el gallo y la gallina asados que él se disponía a comer''. En ese preciso instante el gallo y la gallina saltando del plato se pusieron a cantar. Y desde entonces se dicen los famosos versos: Santo Domingo de la Calzada, que cantó la gallina después de asada. En recuerdo de este suceso se mantienen en la Catedral un gallo y una gallina vivos y siempre de color blanco durante todo el año. Proceden de donaciones y se realiza el cambio de las parejas cada mes. Frente a esta hornacina, que se construyó alrededor de 1445, y debajo de la ventana, se conserva un trozo de madera de la horca del peregrino."
En los Anales Compostelanos figura la fecha de colocación de la primera piedra del templo actual por el obispo Rodrigo en 1158. Domingo Cidamón figura documentado como "obrero-mayordomo", cargo semejante a administrador de la obra y el maestro Garsión, documentado en 1199 como "fabricator" del templo, cuya cabecera debía de estar prácticamente acabada hacia final del siglos XII. Lamentablemente no se documentan los escultores que trabajan bajo las órdenes de Garsión; pero según apunta Bango Torviso, "El principal de estos maestros debió de influir decisivamente en el arquitecto para introducir un dinámico sentido de la articulación paramental que no estaba previsto en el programa original".
Diversas circunstancias bélicas en relación con López de Haro y su hijo, señores de Vizcaya, así como el desacuerdo de Fernando III por establecerse la sede catedralicia en La Calzada, ralentizarían las obras que a finales del XIII no estaban aún concluidas. Las necesidades del templo en lo funcional se priorizaron en la edificación de un altar mayor, el presbiterio dedicado a la Santísima Trinidad y tres ábsides secundarios dedicados a los apóstoles Pedro, Santiago y Bartolomé. Y por supuesto, la ubicación del sepulcro de santo Domingo.
345
6 7
El maestro Garsión desarrolló una cabecera dotada de tres ábsides dispuestos en forma radial. Nave transepto y girola delimitada por grandes y armoniosas pilastras -seis- y sobre la misma una tribuna cuyo cometido es más arquitectónico que funcional.
Los tres ábsides del proyecto original se hallaban separados por lienzos intermedios de la girola, como puede advertirse en la imagen 5. Al exterior del ábside central, que es el único que ha llegado a nosotros del proyecto inicial, se advierten dos recios contrafuertes, en consonancia con los que segmentan la girola. El proyecto de Garsión transmite una sensación de pesadez, a la par que de desconfianza primando los excesos que garanticen la estabilidad de la fábrica. De ello no se libra ni la galería sobre el deambulatorio que es de un cuarto de cañón corrido, reforzado con fajones y cuya funcionalidad es eminentemente estabilizadora del altar mayor y presbiterio que habían de elevarse sobre el centro de la girola. Afortunadamente el maestro escultor principal "fichado" por Garsión hizo variar su proyecto aligerando la obra a base de introducir seis pilares que él decoraría magistralmente. De no haber sido así, el templo sería un mazacote vulgar provisto de recios muros sin la elegancia que transmite al interior.
89
Esa es la sensación, de "pesadez estructural", cuando se contempla el ábside central adosado y contrarrestado a la girola. Posee tres ventanales dobles dispuestos entres dos recios contrafuertes. Cada vano se rehunde en un alargado rebaje del muro exterior a modo de lesena con medio punto dovelado en altura, tan tosco como el resto. Solo en el casi oculto ventanal doble del lado sur hay una chispa de gracia, supliendo las pilastras del rehundido por columnas con sus basas y capiteles apeando el arquillo existente bajo la cornisa (Imagen 4).
Cuando veamos al interior este ábside, advertiremos el desproporcionado parteluz, tosco y amazacotado que obliga a simular un solo vano al interior cuando en realidad son dos al exterior. Y ello se traduce en la extraña forma del "medio punto" de los vanos (Imagen 11). Una muestra más de la incapacidad del maestro de obra, que no debía de estar advertido de las nuevas formas de aligerar los muros, articulándolos en vez de añadir volumen y espesor para compensar los empujes. Quiso hacer una elevada obra; pero con ideas técnicas ancladas en el pasado.
1011
Los capiteles que decoran los ventanales, están en general bastante deteriorados. En ocasiones por la propia meteorización de la arenisca, y otras veces, rebajados intencionadamente, quizá para colocar estructuras de cierre por delante de los vanos. La imagen 11 corresponde al lado norte del ventanal doble central. Se advierte la extraña forma ya comentada del medio punto. El capitel a nuestra izquierda (Imagen 15) muestra la liberación de San Pedro. La imagen 12, resume en sus dos caras el Sueño de San José y la Huida a Egipto. Después (Imagen 13) un ángel turiferario, sedente y en la imagen 14, un capitel "rebajado" que nos deja media cara de muy buena hechura, con peinado a base de coleta trenzada meticulosamente trabajada.
121314
En la imagen 16, la escena de san Martín partiendo su capa con el peregrino, y a continuación un capitel de roleos con figurillas atrapadas en el entramado (Imagen 17).
151617
ADELANTE
Ver mis estadísticas