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LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España) |
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-MURILLO EL CUENDE - DESPOBLADO DE RADA - IGLESIA DE SAN NICOLÁS- |
UTM 30T 613998 4688537 431 m. |
El despoblado o "desolado" de Rada es un enclave defensivo medieval amurallado cuyo origen ha de remontarse al siglo X. Tuvo su apogeo entre los siglos XII y XIV y fue arrasado en 1455 en la guerra civil navarra entre los agramonteses y los beaumonteses. En esa disputa Rada tomó partido por el bando beaumontés que apoyaba a Carlos, Príncipe de Viana por lo que al triunfar el bando agramontés al frente del cual estaba el rey Juan II, el enclave fue arrasado respetándose únicamente su iglesia románica dedicada a San Nicolás. Sancho Ramírez, rey de aragoneses y pamploneses, lo donó a la abadía de Montearagón en 1093.
El lugar está encaramado a lo alto de un cerro-testigo sobre la orilla izquierda del río Aragón dominando gran parte de su vega (Imágenes 1 y 2). Se sitúa al sur de Pamplona de la que dista unos 60 kilómetros entre Caparroso y Carcastillo, más próximo a la primera localidad. Un desvío bien señalizado en la carretera Na-5500 nos lleva hasta lo alto del cerro del despoblado de Rada. Las visitas están condicionadas al horario de apertura, variable según la temporada del año, por lo que es conveniente informarse previamente. El recinto amurallado ocupa la elevada superficie de un cerro cuyas medidas son de 160 metros en su longitud norte-sur y de 92 en la mayor anchura este oeste. La superficie total es de 8.300 metros cuadrados y el perímetro amurallado mide alrededor de 400 metros (Imagen 4). La imagen 4 es activa y colocando sobre ella el cursor se destacan en rojo la torre militar, en marrón, el cementerio al lado sur del templo, en amarillo la iglesia de San Nicolás, en morado el espacio que ocupó la casa del tenente y en azul la ubicación del aljibe que abasteció a esta población.
La iglesia de San Nicolás se asoma hacia la mitad del lado oriental del recinto amurallado y junto con los restos del arranque del torreón cilíndrico constituyen los elementos visuales de referencia del enclave. A tenor de lo visto en otros enclaves defensivos semejantes en Aragón auspiciados por Sancho IIII el Mayor y por sus descendientes, creo que en origen debió de ser un conjunto religioso-militar compuesto por una torre circular situada en su extremo sur y una pequeña capilla castrense ubicada como era lo habitual a poca distancia y en un nivel algo inferior a la misma. Con el paso del tiempo el enclave defensivo acogió en su entorno a una población estable que edificó las viviendas cuyas ruinas podemos apreciar gracias a las campañas arqueológicas, amuralló la superficie del cerro y modificó de modo notable la primitiva iglesia castrense. Este lugar fue la sede de la poderosa estirpe navarra de los Rada, uno de cuyos más destacados miembros fue don Rodrigo Ximenez de Rada, arzobispo de Toledo y Primado de España (1170-1247). Ya en el siglo XIV pasó a ser propiedad de la familia Mauleón.
La morfología del templo que podemos ver hoy, es extraña, apartándose en muchos de sus aspectos del arquetipo del templo románico. Ello se debe a que en origen fue un pequeño templo castrense de nave única rematada a oriente por cilindro absidal que con el paso del tiempo, acaso por las nuevas necesidades derivadas de la población que aquí se estableció, fue recrecido hacia poniente y hacia el sur con el añadido de una pequeña nave rematada en cabecera recta sobre la que se alza la espadaña bífora actual. La planta del templo nos aporta información en ese sentido (Imagen 15) Esas circunstancias hacen que la portada de acceso nos aparezca descentrada con respecto al hastial de poniente (Imagen 22). Probablemente correspondan a la primitiva edificación castrense -aunque rehechas- el cilindro absidal, el inicio del muro sur hasta la portada meridional y poco más. Los sillares que componen el templo son de arenisca, bien escuadrados y con alguna marca de cantero (se repite una rectángulo abierto por su lado corto a modo de omega geométrica). En altura del inicio meridional de la nave hay bastantes sillares de caliza blanca que destacan del resto, También en la base de ese lienzo vemos el arranque de un desaparecido responsión de sección prismática (semejante al que se alza todavía entre cabecera y nave) que se corresponde con su homólogo al interior y que deben de pertenecer al templo original. El cilindro absidal no posee vano central, no se si por modificación tardía o porque en origen fuese diseñado así, lo cual me extraña. Tan solo posee un vano aspillerado en el lado sur del cilindro absidal cuyo perfil superior tallado en un sillar y rematado en ángulo es tan inesperado como su hechura al interior, no derramada y adintelada por la moldura ajedrezada.
Hacia la mitad del muro sur de la nave posee un pequeño vano rectangular situado a continuación del muro original y del arranque del contrafuerte señalado. Es evidente la incoherencia de sus sillares con los del muro que lo contiene. Su dintel, probablemente recuperado de un vano previo, posee labrado uno de los dos crismones que adornaban a este templo. Se trata de un crismón trinitario de seis brazos con aro marco circular y roseta central. Posee sus símbolos apocalípticos en situación ortodoxa y es destacable el remate en forma de "L" del extremo inferior del símbolo "Rho" (P). Cronológicamente según Olañeta debe de corresponder a inicios del XII y habría que relacionarlo con el templo original (Imágenes 10 y 11).
Hay un segundo crismón en este templo y se encuentra recolocado en el lateral meridional de la espadaña que corona la nave norte bajo la imposta que delimita el tramo recto del arranque del piñón (Imágenes 12 a 14). En este caso estamos ante un crismón del tipo navarro según clasificación de Matarredona-Olañeta, grupo definido por poseer la tilde dentro del vano de la "P", a modo de cruz. Olañeta lo sitúa cronológicamente en el siglo XIII y lo remite a las reformas efectuadas por don Rodrigo Ximenez de Rada. Evidentemente no fue este su lugar inicial. Debió de coronar alguna de las puertas del templo y en alguna reforma fue reutilizad ratificando la impresión de que esta iglesia ha sufrido muchas variaciones a lo largo del tiempo.
Las imágenes 16 a 19 muestran diferentes tomas de los restos de las viviendas, del aljibe y de un torreón del lienzo norte de la muralla. La vivienda de la imagen 16, situada justo al lado norte de la iglesia es la más amplia con 270 metros cuadrados y seis estancias intercomunicadas. Dado su tamaño y privilegiada situación se considera que fuese la casa del tenente. Bastantes de las viviendas presentan en su centro una especie de basamento columnar de piedra que servía de apeo a una columna de madera para sustentar una viga transversal del segundo piso. El aljibe corresponde a la fase de ocupación plena del poblado, dado que en su inicio no debió de ser necesaria su capacidad y que en ese momento los aljibes solían realizarse en la base de las propia torre defensiva. La muralla perimetral ha de corresponder en su mayor parte a un momento avanzado con función de protección de la población asentada en este lugar.
La imagen 20 es un detalle del arranque del desaparecido torreón circular situado el extremo sur del cerro. Se aprecian las bien trazadas hiladas de sillares colocados a soga y tizón y también parte de su núcleo en los lugares donde se han desprendido los sillares exteriores. La hechura es coherente con el momento en que Sancho III el Mayor inicia la línea de fortificaciones defensivas que llegó hasta el antiguo condado de Aragón. Su diámetro exterior es de 8,5 m y lo conservado alcanza los 3,5. A pesar de que se invoca un origen árabe, no lo veo factible, dado que esos sillares no presentan almohadillado y su disposición es claramente románica. Entre el torreón y el resto del poblado se edificó un muro ataludado que conforma un foso defensivo (Imagen 21). Ya he apuntado al inicio mi impresión de que estaos ante un conjunto religioso-militar al uso, compuesto de torre defensiva e iglesia castrense y que fueron el núcleo inicial del poblamiento medieval.
La iglesia de San Nicolás presenta una extraña disposición de su hastial de poniente con la puerta de acceso descentrada. Como ya he mencionado se debe a las sucesivas fases de ampliación de la misma correspondiendo la estructura septentrional añadida a la nave añadida al templo, momento en que probablemente se le añadió el tramo de los pies y se edificó este hastial (Imagen 22). La portada occidental es tardía y se compone de una arquivolta de medio punto dovelado apeada en columnas (modernas) con sus correspondientes basas y capiteles. Estos son de hechura muy sencilla en consonancia con el momento avanzado de su realización (siglo XIII) fruto de reformas del obispo don Rodrigo (Imágenes 23 a 25). Como detalle curioso, señalar que en el segundo sillar por arriba la jamba derecha podemos apreciar -bastante deteriorado- un grafiti medieval de los conocidos como "Lignum Crucis" que algunos relacionan con la presencia de esa sagrada reliquia en el templo. A su lado hay también un probable crismón inciso. La imagen 26 es activa y situando el cursor sobre ella se resaltan estos elementos descritos.