A ambos lados
del Pantocrator se configura un apostolario completo a base de seis apóstoles
a cada lado, situados bajo arcos trilobulados que apean en pequeños
y cuidadosamente elaborados capiteles (Imágenes
8 a 11).
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Sobre ellos
y en los valles de los arcos trilobulados, hay estructuras torreadas que se
continúan hacia los lados con una especie de muralla multifenestrada. Los apóstoles
del lado sur se hallan en su casi totalidad descabezados. También
en este lado se perdieron los capiteles, que han sido restaurados.
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Se aprecian
varias manos en esta obra del apostolario. La figura más septentrional
(Imagen 5) es evidentemente de un escultor distinto al del Cristo,
mientras que la pureza de líneas y fuerza expresiva de la imagen
1 nos permite asegurar que su autor fue el mismo
que el del Cristo, al menos en su cara y torso pues las piernas y pies
cruzados dibujan una postura prácticamente imposible de lograr con
los huesos sin descoyuntar (Imagen 3 y 6).
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El detalle
con que están trabajados los capiteles figurados del friso, está
acorde con el resto de la obra. Destaca uno "andresino" (Imagen
7) y también en de la imagen 10 que trata de remedar al magnífico capitel de ángulo del claustro de San Andrés del Arroyo. También hallamos figuras desquijarando
leones, roleos calados, aves entre roleos, columnas con fustes de decoración
espiral o zigzagueante... perfección incluso en lo pequeño,
que casi no se aprecia desde la calle.
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Decía más
arriba que el apóstol más septentrional denota claramente
una mano diferente. Me recuerda en su estilo y formas a la talla del maestro
del tímpano de Cabestany, en concreto a la cabeza procedente de San
Pedro de Rodas; por los rizos del pelo y por la forma de tallar los globos
oculares de un modo tan peculiar pareciendo que han engastado esferas en
las cuencas. La talla de Carrión es de labra mucho más sencilla;
pero da la sensación que el escultor conocía la obra del de Cabestany.